Campamento sobre conflictos armados

El campamento de este año ha tenido la peculiaridad de celebrarse en septiembre. Normalmente solemos celebrar el campamento de verano en los meses de junio y julio, como culmen del curso. Sin embargo, este curso, condicionados por la incertidumbre de poder recibir un nuevo convenio, nos hemos visto obligados a retrasar su celebración al mes de septiembre. De igual modo, hemos podido disfrutar de unos magníficos días de convivencia reflexionando y trabajando sobre temas sociales que interesan a la juventud.

El tema de este año ha sido el de conflictos armados. Es un tema que ya hemos trabajado anteriormente con otros grupos de plataformas, así que el trabajo del equipo educativo ha sido el de adaptar ese contenido a la actualidad y a las inquietudes de los nuevos jóvenes de plataformas. Por desgracia, hay conflictos armados que perduran en el tiempo y, lamentablemente, con ese paso de los años incluso van quedando en el olvido. Por tanto, este campamento recoge conflictos actuales, muy mediatizados por los medios de comunicación y las redes sociales, como puede ser el de Rusia y Ucrania, así como conflictos ya casi olvidados, véase el caso de Sáhara o Palestina.

De todos ellos hemos trabajado las causas, las consecuencias, la implicación que tenemos los países del norte, los beneficios económicos que se extraen a costa del sufrimiento de otros, etc. y por supuesto también hemos visto como la gente de esos países se organizan para acabar con el conflicto y la respuesta internacional que podemos dar desde aquí. Hemos conocido personas y colectivos comprometidos con la paz y la justicia.

Estamos muy satisfechos con el trabajo realizado. No es nada fácil sacar esperanza de los jóvenes ante temas como este, que son tan lejanos, tan crudos y complejos. Sin embargo, así se puede observar en las valoraciones que ellos y ellas mismas hacen, sí que hay un rayo de esperanza para seguir trabajando en la solución de estos conflictos.

Otro mundo es posible y plataformas quiere ser parte de él.

¡Malditas sean las guerras y los canallas que las hacen!